Podríamos decir que rayar el Ángel de la Independencia en una manifestación no es bueno.
Podríamos decir que bloquear una avenida para demostrar inconformismo y dar voz a atentados contra las mujeres no es bueno.
Podríamos decir que el hecho de que las mujeres tengan que dejar de trabajar un día para remarcar la necesidad de un cambio no es bueno.
Pero independientemente de si las consideramos buenas o no, lamentablemente tenemos que estar de acuerdo en que todas estas cosas son necesarias.
Movimientos como el de la igualdad y el alto a la violencia de género, que busca impulsar una sociedad más justa e igualitaria para todos, tienden (y justificadamente) a levantar polémicas sobre métodos y formas. Ha sido tanto el tiempo que hemos ignorado injusticias y fallas graves que han generado una olla de presión en las mujeres y en la sociedad, tanto que, como cualquier olla de este tipo, al no ser atendida a tiempo, explota.
Creo que es importante distinguir entre cosas que quizás personalmente podamos encontrar como negativas (eg. ver al Ángel de la Independencia pintarrajeado) y las cosas que son necesarias para que se lleve a cabo cambios que tanto necesitamos.
Es importante ver estas manifestaciones como un efecto y enfocarnos en participar en la resolución de la causa. Tengo la impresión de que muchas veces (por la forma en la que se comunica en los medios, etc.) se gasta tiempo y conversaciones en platicar sobre los efectos, cuando en realidad es tarea de todos aprovechar la atención que estos hechos reciben y redirigir estas conversaciones para profundizar y resolver las causas que los provocan.
Es necesario que todas estas manifestaciones sucedan, porque como sociedad hemos fallado. Es lamentablemente importante que se manifieste el inconformismo e impotencia a través de actos, ya que necesitamos de estos para fijarnos en cosas que antes no nos fijábamos, para tener conversaciones que antes no hemos tenido y para dar salida al enojo y frustración que no hemos sabido solucionar.
Ojalá que podamos hablar menos de lo bueno y de lo malo, de si se pinto X cosa o si se daño tal otra, para hablar de lo necesario, de los casos no solucionados, de las cosas que podemos cambiar en el corto plazo, de lo que necesitamos resolver y transformar. Solo así podremos eventualmente resolver los retos a los que nos enfrentamos y honrar la memoria de quienes lamentablemente ya no están con nosotros.
Que se haga lo que sea necesario y que aprovechemos su impacto para transformarnos.
mm.